Lo he vuelto a hacer. Y mira que salí de casa con el firme propósito de no comprar nada de nueva temporada, pero al final, tras varias idas y venidas a la percha, probármelos, devolverlos a la percha, intentar convencerme de que el invierno no ha hecho más que empezar, de que seguro que en los próximos meses encuentro prendas tan bonitas o más que estas, para al final... ¡pasar por caja!
Pero es que fue entrar en HyM en busca de unos botines a los que tenía echado el ojo desde Navidad y como por arte de magia acabar en lo más ordenado, bonito, alegre y NO REBAJADO de la tienda. Y es que los dos vestiditos ¡que monada! son de la nueva colección.
¿Qué os parece este en color mandarina, la versión 2012 del naranja que tanto llevamos el verano pasado?
¿Y que me decís de este otro, ceñido por delante y tipo túnica por detrás? La verdad es que el amarillo no es precisamente un color que me favorezca, a mis ojos, piel y cabello les suelen ir más las tonalidades frías, pero integrado con el negro y blanco el resultado es genial.
Para acallar, en cierta medida, mi mala conciencia, he combinado ambos vestidos con el mismo blazer, bolso, zapatos... todo de mi fondo de armario y que ya me los habéis visto en otros outfits. En esta ocasión en lugar de buscar distintos accesorios para un mismo vestido, con objeto de conseguir estilismos diferentes, he hecho al contrario, vestidos distintos para los mismos complementos...
Además, con el NO INVIERNO que estamos teniendo, puedo empezar a ponérmelos mañana mismo ¿no os parece?