Seguro que en más de una ocasión te has encontrado con una agenda plagada de obligaciones y compromisos, profesiones o personales que atender y que exigían un dress code absolutamente diferente, pero sin tiempo para pasarte por casa a "recomponerte" o cambiarte.
Por ese motivo siempre insisto en lo importante que es, por el tiempo, dinero y quebraderos de cabeza que nos ahorra, tener un armario a nuestra medida, en el que todo nos siente como un guante y además las prendas sean muy versátiles y armonicen entre sí.